Lógicamente no todas las comunidades de vecinos son iguales, cada una tiene sus particularidades, sus dimensiones, la posibilidad de tener o no zonas verdes, contar con mobiliario, y así un sinfín de factores más. Evidentemente, estos factores pueden provocar que el precio del servicio contratado varíe al alza o a la baja, como también puede influir la calidad exigida a la empresa de limpieza, los gastos que debe asumir la empresa para poder realizar su labor, así como el tiempo preciso para realizar su labor.
También es razonable que cuanto mayor sea la frecuencia con la que el personal experto acuda a la comunidad de vecinos a realizar sus tareas, mayor será el precio a pagar. Y es que no es lo mismo que el servicio de Limpieza de comunidades se reciba una vez por semana que de forma diaria, pero también mayor resultará la comodidad de ver todo el portal y la escalera en perfecto estado. Cada comunidad deberá pactar cuales son los servicios que más les interesan y con qué frecuencia desean que esos servicios sean recibidos, y así lograr el precio que más se adapte a los bolsillos de las distintas comunidades.
No es lo mismo tratar una comunidad con jardín, garaje, piscina, y un gran portal repleto de mobiliario, que un simple rellano donde sólo encontramos el pasillo de entrada al edificio sin más y la escalera. Claro está que no se precisarán ni el mismo número de horas, ni el mismo material de limpieza y productos a utilizar para desempeñar todas las funciones de forma eficaz y exitosa.
Pero sin lugar a dudas lo que más puede encarecer el precio de la contratación de los servicios de una empresa de limpieza es el número de horas o frecuencia con la que asistan a limpiar la comunidad de propietarios. Es importante valorar cual es la mejor opción de todas para ahorrar dinero y a su vez mantener la comunidad en perfecto estado, ya que tan poco rentable puede resultar contratar demasiadas horas como contratar muy pocas horas y que la comunidad vaya deteriorándose por no tener el correcto mantenimiento.