A la hora de plantear una reforma, no es lo mismo hacerlo en un salón, donde buscas aspectos como la iluminación, la climatización, etc, y ya te plantearás cómo decorarla, que, en el cuarto de baño o cocina, donde la reforma debe integrar los elementos que la harán práctica y cómoda. Así, las reformas de cocinas en Barcelona, lugar vanguardista donde los haya, no solo tendrá en cuenta contar con horno, campana extractora y un lugar para el frigorífico ya determinado, sino otros aspectos que la conviertan en atemporal a la par que moderna. ¿Cuáles son estos aspectos?
Distribución según tamaño
Según la cocina sea en forma de tubo o más cuadrada, podremos plantearnos diferentes soluciones de distribución, así como si cuenta con ventanales amplios o más encajonados, determinante para los métodos de extracción, por ejemplo.
En el caso de contar con el espacio y la distribución adecuada, las cocinas en forma de isla son una solución que no entiende de modas gracias a unir practicidad (se aprovecha mejor el espacio) y diseño (no da sensación de saturación)
Paredes más adaptables
Las viviendas de nueva construcción cada vez se la “juegan” menos en cuanto a sus diseños. Así, rara vez se alejarán de tonalidades claras y azulejos blancos. Unos azulejos recargados, de colores o muy decorados, pueden que nos entren por los ojos al momento de diseñar la cocina, pero al tiempo puede cansarnos. Pasamos horas y horas en esta estancia, no podemos sobrecargarla estéticamente.
Por ello, una solución atemporal son los azulejos blancos con, si acaso, una cenefa decorativa elegante y un suelo donde prime la limpieza y el conjunto con el resto. La atemporalidad de esta solución se basa en que, de querer una mayor decoración, podemos acudir a vinilos decorativos que eliminar de forma sencilla si nos cansamos de ellos. Paredes alternas que no dispongan de azulejos puede servirnos para dar un pequeño toque de color que cambiar ocasionalmente con pintura.
Espacios de trabajo más amplios
La fiebre “Masterchef” ha ocasionado que no pocas cocinas se hayan quedado pequeñas al necesitar varios espacios de trabajo: uno para cortar, otro para la elaboración, otro para el emplatado… Lo que antes se realizaba junto a los fuegos por tandas, ahora pide poder movernos cómodamente de una encimera a otra teniendo espacio para cada una de estas tareas.
Por ello, no conviene recargar el espacio con electrodomésticos y útiles de cocina de entrada, ya que es muy probable que, si somos aficionados a la cocina, se nos quede pequeña enseguida. Si podemos aislar la lavadora por ejemplo de esta estancia, mucho mejor.
Materiales duraderos y que soporten el día a día
Por desgracia, sabemos que un microondas, un lavavajillas o cualquier electrodoméstico, de entrada, difícilmente nos dure décadas, pero el resto de elementos que integran la cocina sí debemos pensar que deben lucir lustrosos el mayor tiempo posible.
Así, aspectos como la encimera debemos priorizar que sea de calidad, capaz de soportar golpes, superficies calientes, cortes y otros tantos “castigos” del día a día en una cocina.